No creo
una respuesta para siempre.
Algunas verdades que circulan
sin esfuerzo
hacen decoroso este paseo.
Se que arrastro una imagen
deslucida por la comodidad
de pensar
que solo en el cara a cara
uno puede dimensionar
el encuentro.
Lo más difícil es retener la promesa
y esparcirla en fragmentos
como señales que indiquen
un camino y un propósito.