sábado, 21 de marzo de 2015

Esquina



Lector de Marx, peronista tardío,
tenés la ciudad a tu disposición
para buscar trabajo, maldecirla,
o enloquecer de angustia en cualquier calle.

O por hábito de espalda al sindicato,
escribir el graznido metafísico.
Y esperá, esperá, seguí esperando
que todo no tardará en llegar.

¿Qué haces parado acá,
golpeándote una pierna con el diario?
Hondamente respirás el viento sur
aun con sabor a pasto y a desierto,
y hacen bien las grandes nubes - lentas -
en el azul frío de agosto.

Qué desamparo, no? 


Hugo Caamaño (1923) poeta argentino- De Obra Poética - Alción Editora - 2007